INTRODUCCION
Muy buenos días, amados hermanos, amigos, conocidos y quienes me escuchen. Hoy estamos titulando la meditación: “La Trinidad de la existencia humana.” Basado en el Nuevo Testamento en 1 Juan 5:8 y dice así: ”Y tres son los que dan testimonio en la tierra, el espíritu, el agua y la sangre. Y estos tres concuerdan.”
ORACION
Oremos, Padre de la gloria en el nombre de Jesús te damos gracias por la vida, gracias Señor por tu palabra, la palabra que nos instruye todos los días desde que te conocimos Padre, gracias Señor por la paz que tú das en nuestros corazones pese a las situaciones especiales que pasamos Señor, pero con la experiencia de tener tu Espíritu Santo al lado de nosotros. De sentir Señor en nuestros corazones, que Jesucristo está en medio de nosotros.
Así, Señor, que ahora con tu palabra nosotros pedimos el perdón de nuestros pecados. Y te pedimos, Señor, que sea tu Espíritu Santo el que nos orienta el que nos da inspiración. Señor en estas doctrinas, estas doctrinas que son interesantísimas para entender la Trinidad tuya, Padre, Padre, hijo y Espíritu Santo.
Así que Padre, gracias por esta palabra. Te solicitamos la bendición de nuestro grupo Padre, tú conoces la necesidad de cada uno de nosotros en los diferentes lugares, geografía de la tierra, Padre donde estamos en el Santo nombre de Jesús, Señor te damos las gracias Padre amén, amén y amén.
MEDITACION
Ok. Aquí estamos viendo el apóstol Juan que el que explica a los creyentes acerca de este misterio e interdependencia de la vida humana, y eso aproximadamente por los años 80 después de Cristo. Había un movimiento nóstico, que tiene que ver con el conocimiento, especialmente de la filosofía griega.
Así que esta trinidad es esencial, el espíritu, el agua y la sangre es esencial para que el hombre pueda existir, de lo contrario su existencia fuera nula.
Esos falsos maestros habían entrado a las iglesias con doctrinas anticristianas y Juan les pone un ejemplo para entender la Trinidad de Dios, a través de la Trinidad de la existencia humana, tres dan testimonio en la tierra:
1) El espíritu: Los que viven es porque tienen un espíritu. Sin él son materia muerta. Todos los que vivimos, tenemos un espíritu, de tal manera tal que, si no, no estuviéramos vivos.
2)El agua: Podrán tener materia y espíritu, tenemos el cuerpo y el espíritu, pero para poder subsistir necesitamos agua.
3)La sangre: Y naturalmente que en nuestra morfología la sangre es la fuente que alimenta todo el organismo biológicamente, sin ella el hombre no tiene vigor alguno.
Así que esta trinidad es esencial, el espíritu, el agua y la sangre es esencial para que el hombre pueda existir, de lo contrario su existencia fuera nula.
Lo mismo ocurre en el cielo. Otro personaje, Pablo, habla el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo estos tres son uno. Pero al terminar su saludo Pablo decía, la gracia del Señor Jesucristo, que es el hijo, el amor de Dios, que era el Padre y la comunión del Espíritu Santo, era el Espíritu Santo, sean con todos vosotros y la referencia está en 2 Corintios 13:14.
Amigo y hermano hoy en día abundan falsos maestros tratando de llevar filosofías de humana sabiduría. ¡Ten cuidado! Juan terminó su segunda carta con estas palabras, cualquiera que se extravía y no persevera en la doctrina de Cristo no tiene a Dios, el que persevera en la doctrina de Cristo, ese si tiene al Padre y al Hijo. Si alguno viene a vosotros y no trae esta doctrina, no lo recibáis en casa ni le digáis bienvenido.
Si conoces a algún ser humano que pueda vivir sin esta Trinidad que hemos explicado ¿Me lo podrías presentar? Que el Señor bendiga tu día hasta luego.
