Introducción
Muy Buenos días, amados hermanos, familiares, vecinos y quienes me escuchen. El tema para presentar hoy, lo hemos titulado un árbol plantado. Un árbol plantado. Y utilizamos en Jeremías 17:7-8, Jeremías 17 7 y 8. Y dice así: Bendito el varón que confía en Jehová. Y cuya confianza es Jehová. Porque será como el árbol plantado junto a las aguas que junto a la corriente echará sus raíces. Y no verá cuándo viene el calor. Sino que su hoja estará verde. Y en el año de sequía no se fatigará. Ni dejará de dar su fruto.
Oración
Tremenda palabra. En el nombre de Jesús Oramos. Padre, queremos bendecir tu nombre en esta hora, Señor. Bendito seas, Señor, Santificado seas. Y queremos agradecerte, Señor. Porque tu palabra nos ayuda, nos redarguye, nos mueve, Señor, a desarrollarla con la conciencia. Nuestros valores, revisarlos, Señor, en lo que es lo correcto. Y sabemos, Señor, que confiar en ti produce el fruto del espíritu. Pero confiar en el hombre, es ser maldito por ti, Señor. Te solicitamos que nos alejes padre de la aceptación de la psicología humanística. Y queremos descansar en tu palabra. Te lo solicitamos padre en el nombre de Jesús, Amén. Amén y amén.
Meditación
Ok. Aquí estamos viendo el panorama cuando el profeta hace la relación de la confianza del hombre en Jehová, con la firmeza que tiene un árbol que ha sido plantado cerca del río. Un árbol con una raíz firme y fresca puede soportar los embates de la naturaleza. Ya sean fuertes vientos o días muy soleados.
Amigo y hermano. El hombre que confía en Jehová siempre estará seguro. Ya su dependencia viene de lo alto. Así como el árbol del agua, su dependencia viene de la tierra. Así que en este día espero que seas ese hombre o esa mujer que se planta en la tierra con la esperanza de vivir para aquel que viene del cielo. No olvides. Qué árbol junto a corrientes de agua, se asemeja a un hombre que tiene plena confianza en Dios. Que el señor bendiga tu día hasta luego.
