INTRODUCCION
Buen día, hermanos, amigos. A nuestra comunión con Dios. Hoy la meditación la hemos titulado. Cuando todo es fútbol. Cuando todo es fútbol. Estamos en utilizando dos versículos en Nuevo Testamento en 1 Corintios 15:32. Que dice así. Algunos dicen comamos y bebamos porque mañana moriremos. En Marcos 1:15. Arrepentíos y Creed en el Evangelio. Y en el Antiguo Testamento, en Jeremías 5:31. ¿Qué pues haréis cuando llegue el fin? Tremendamente interrogante. Y de eso se trata. El quehacer en el tiempo finito que tenemos de vida. Eso es importante reflexionar sobre nuestro tiempo.
ORACION
Ok, oremos. Padre en el nombre de Jesús, te queremos darte gracias por la vida, gracias por tus bendiciones y santificamos tu nombre, padre. Tú eres nuestro Dios bondadoso manifiesto en nosotros. Por tu majestuosidad, señor, Tu bondad, tu misericordia. Ese amor, señor eterno para nosotros. Así que sea esta palabra tuya, nuestra guía. Cada momento, cada instante. Que estas palabras sea nuestra fortaleza vivencial. Para cumplir señor con la ruta que nos trazaste sin desmayar haciendo tu voluntad. Damos gracias, padre, confiando en fe que tu palabra se cumplirá en nosotros. Gracias en el nombre de Jesús, Amén. Amén y amén.
MEDITACION
OK. Cuando todo es fútbol. Algunas semanas de competición no son nada llamativas, para los que no se interesan en el fútbol. ¿Y qué tienen y qué tienen buenas razones para estar apasionados por la Copa del mundo? A veces se oye decir que lo más importante de la vida es el fútbol. No discutiremos que alguien pueda sentirse feliz en un estadio. Pero esa pasión. ¿Puede por sí sola colmar nuestras aspiraciones más profundas.?
¿No nos hace olvidar que estamos buscando, un sentido a nuestra vida y una felicidad duradera? La Biblia nos dice que el mundo de hoy está condenado porque vive lejos de Dios. Sin preocuparse por sus derechos. Por ello, el hombre está tan turbado y muy a menudo es infeliz. Desgraciadamente, todo lo que hace para olvidar su fracaso, lo prepara para un despertar mucho más doloroso.
Cuando tenga que comparecer ante Dios, fue soberano. Pero Dios le tiende la mano y le ofrece la reconciliación. Dio a su hijo en sacrificio. Para salvar a los seres humanos. Todo el que lo desea, puede, puede ponerse en relación con él y conocer lo personalmente.
Amigo y hermano. Si usted acepta lo que Dios lo ofrece. Creyendo lo que dice. Pues su palabra es la verdad. Que entra en una relación con él. Acuérdese de lo que dice Apocalipsis 3:20, he aquí, yo estoy en la puerta y llamo, si alguno oye mi voz y abre la puerta y es tu corazón, entraré y cenaré con él, se va a quedar con usted.
La seguridad, la paz, el Gozo y la esperanza que Dios da, llenarán sus pensamientos. ¿Entonces podrá usted apreciar? En su justo valor, todo lo que suceda. Los legítimos placeres cotidianos lo dejarán solo y desamparado cuando tarde o temprano desaparezca. El señor, bendiga tu día hasta luego.