INTRODUCCION
Buen día, amados hermanos, amigos, conocidos y quienes me escuchen. Hoy estamos utilizando en la presentación de la cápsula bíblica, el título: “En las manos de Dios.” Y está en Mateo 6:6 en el Nuevo Testamento y dice así: ”Más tú cuando ores. Entra en tu aposento. Y cerrada la puerta ora a tu Padre que está en secreto. Y tu Padre que ve en lo secreto, te recompensará en público.”
ORACION
Oremos. Padre de la gloria en el nombre de Jesús te damos gracias por la vida, por tu palabra, por tus bendiciones. Santificado sea tu nombre en esta hora Padre y te pedimos el perdón de nuestras fallas, nuestros pecados.
Y también Señor, sabemos que tú nos enseñaste a través de tu palabra, Señor, nuestros deberes religiosos. Jesucristo mismo nos enseña, Señor a través de la caridad, la oración y el ayuno. Y, que tiene que ser en secreto, no para ser vistos y elogiados. Perdona nuestros comportamientos, si es que estamos en algunas situaciones de esta naturaleza.
Señor que nuestra congregación, busque la santidad Señor, siempre aportando lo mejor y buscando tu palabra y aprendiendo. Que entre más Señor nos acerquemos a ti en lo secreto, estaremos siendo siempre bendecidos. En el Santo nombre de Jesús, Señor te damos las gracias, y solicitamos bendición en este grupo participante en el nombre de Jesús. Amén, amén y amén.
MEDITACION
Ok. Estas fueron las palabras del Señor Jesucristo a sus discípulos en cuanto a la oración. Ya que muchos hacían tocar campanas para ser oídos en las sinagogas y en los lugares públicos. Era muy importante entender esto, ya que la gran mayoría querían tener éxito y ser reconocidos por la gente.
Jesús les dijo que ya tenían su galardón. Pero a sus discípulos, les enseñó que el verdadero éxito que tenía, era aquel que comenzaba en lo secreto y al fin redundaba en público.
Amigo y hermano. Primero hay que ponerse a disposición de Dios y servirle con amor, sin esperar nada a cambio. A veces la gente te aplaudirá y querrá estar a tu lado. Pero otras veces te ignorará, es normal en la conducta humana.
Pero si entendemos en el secreto del Señor, en su intimidad, él sabrá cuándo te recompensará afuera. Hay que entrar primero con Dios, para salir en las manos de Dios. Que esta consejería sea de gran beneficio en tu vida. El Señor bendiga tu día hasta luego.