INTRODUCCION
Buen día, hermanos y amigos. Bienvenidos a nuestra comunión con Dios. Hoy nuestra meditación la hemos basado en el hijo eterno, el título, “El hijo Eterno”. Estamos utilizando dos versículos del Nuevo Testamento en Hebreos 7:24-25 y Colosenses 1:16-17. En Hebreos 7 del 24 al 25 dice así: Mas este o sea Jesús, tiene un sacerdocio inmutable. Puede también salvar perpetuamente. A lo que por él se acercan a Dios. Jesús no cambia esa inmutabilidad y es perpetuo, es eterno. Y en Colosenses 1 16 y 17, dice: En él fueron creadas todas las cosas, estamos hablando de Jesús, él es antes de todas las cosas.
ORACION
Oremos. Padre la gloria, te damos gracias por la vida, gracias por tus bendiciones, gracias por esta palabra. Una palabra que nos ha enseñado, señor, a meditar, padre, a reconocer que somos pecadores. Aún nacido de nuevo padre, sabemos que tenemos que ser constantes en tu palabra. En oración, señor, buscando La Santidad. Pero te damos las gracias porque eres tú el que nos da la fuerza a través de tu Espíritu Santo.
Así, señor, que esta palabra que nos muestra que fuiste nuestro salvador y sacerdote inmutable y eterno. Y sigues siendo santo, santo y salvando al mundo de pecado. ¿Señor, cómo no agradecer, padre? Porque estamos prestos, señor. Esperando la segunda venida de nuestro Señor Jesucristo.
Tu palabra nos muestra que él prometió regresar padre. Así que te damos las gracias, padre para no menguar, fortalécenos, padre para no menguar en nuestros esfuerzos y perseverar en nuestros quehaceres, señor. Bendiciendo tu nombre, esa relación permítenos, señor, sea continua. En el santo nombre de Jesús, te damos las gracias, amén. Amén y amén.
MEDITACION
OK. El hijo eterno. Ese recién nacido, que estuvo acostado en un pesebre de Belén. Es el hijo de Dios. Treinta años después, dijo a sus adversarios. Antes que Abraham fuese yo soy, en Juan 8:58. En Hebreos 13:8 dice el señor, dice la palabra, él es el mismo ayer y hoy y por los siglos. Cuando Dios creaba los cielos Jesús estaba ahí. Proverbios 8:27. En él fueron creadas todas las cosas. Y él es antes de todas las cosas, Colosenses 1, 16 y 17.
En una de sus últimas oraciones antes de ser rechazado y crucificado, pidió a Dios glorificarlo con la gloria que había tenido junto a él antes del mundo fuese Juan 17:5. No tiene principio de días Hebreos 7:3, pues es eterno.
Ahora, Jesús se hizo hombre y se ofreció para la gloria de Dios y la salvación de los hombres. Dios totalmente satisfecho con ello lo resucitó y lo elevó a su gloria. Como Jesús mismo lo había anunciado. Salí del padre y he venido al mundo. Otra vez dejo el mundo y voy al padre en Juan 16:28. Según su promesa, pronto volverá a buscar a todos los creyentes. Pues dijo, vendré otra vez y os tomaré a mí mismo para que donde yo estoy vosotros también estéis. En Juan 14:13
Amigo y hermano. Más tarde volverá para ejercer el juicio y establecer su reino porque preciso es que el reine. En 1 Corintios 15:25. Cuando su reinado de 1000 años termine, el señor entregará el Reino de Dios y padre para que Dios sea todo en todos en 1 Corintios 15:24-28. Así que esos momentos, dicho por la palabra, los estamos esperando. Cuando estemos en vida espiritual en esa eternidad con el señor. El señor, bendiga tu día hasta luego.
