Introducción
Amados hermanos. Hoy presentamos el tema titulado: Bajo la sombra del Omnipotente. Y recomendamos leer el Salmo 91, sin embargo, estamos utilizando dos versículos del Salmos 91:1-2 que dice así:
“El que habita al abrigo del altísimo, morará bajo la sombra del omnipotente”. Diré yo al Señor, “esperanza y castillo mío, mi Dios en quién confiaré”.
Y en Isaías 32:2 dice:
Será como escondedero contra el viento y como refugio contra el turbión, como arroyos de aguas en tierra de sequedad, como sombra de gran peñasco en tierra calurosa. Poder grande, un poder de protección.
Oración
PADRE celestial en el nombre de Jesús te damos gracias por la vida. Gracias Señor por todas tus bendiciones recibidas en tiempos difíciles. Bienaventurado sea tu nombre PADRE. Te damos las gracias y pedimos el perdón de nuestras fallas, nuestros pecados.
Gracias por esa palabra tuya que nos confirma tu protección Señor, a quienes creemos y vivimos en estos tiempos y de todos los tiempos. Señor, el camino que nos has trazado Señor, por vivir el camino que tú nos has trazado, nosotros por Fe, por Jesucristo, la salvación.
Por ello mi Dios gracias, en el nombre de JESUS. En el nombre de JESUS, bendice todos los que estemos participando Señor en esta tarea, amén, amén y amén.
Meditación
Cuando era niño, a menudo jugábamos al escondite. A veces los más pequeños se escondían detrás de una pared, sin sospechar que el sol los traicionaba al proyectar su sombra. Si descubrimos la sombra de una persona, esa persona no está lejos.
El versículo de hoy habla de morar bajo la sombra del Omnipotente, para evocar la proximidad tan fuerte del creyente con su Dios. La protección y el amor con el cual Dios rodea a los que confiamos en El.
El salmo 91 expresa la total confianza que el Señor JESUS tenía en el PADRE. El experimentó perfectamente las expresiones de este salmo: ” Por cuanto en mí ha puesto su amor, yo también lo libraré” en el versículo 14.
Imitando al Señor, los creyentes pueden experimentar la realidad de estas palabras. Pueden habitar durante la ausencia de su Señor al abrigo del Altísimo. Es decir, gozar por la Fe de su presencia y de su amor.
Que condición tan esperanzadora, tan agradable que nos da paz y amor. Gozar por la Fe de su presencia y de su amor. Amigo y hermano, vivimos en medio de peligro de los que muchas veces no somos conscientes.
Quizás, a veces nos sentimos sumergidos en la angustia o asaltados por múltiples miedos. Este salmo nos dice que debemos habitar al abrigo de Dios. Vivir en su comunión en una relación de confianza y amor con El. Es una relación de confianza y amor con El.
Así permaneceremos bajo su sombra. Muy cerca de Él. Y podremos decir: “Has sido mi socorro”. Y así, en la sombra de tus alas me regocijaré. Salmos 63:7
Que el señor bendiga tu día. Hasta luego.