INTRODUCCION
Buen día, amados hermanos, vecinos, conocidos, y quienes me escuchen. Bienvenidos a nuestra comunión con Dios. Hoy nuestra meditación la hemos titulado: “La oración del justo” Está basada en el texto del Nuevo Testamento, en el libro de Santiago 5:16 y dice así: ”Por eso confiésense unos a otros sus pecados. Y oren unos por otros para ser sanados. La oración fervorosa del justo tiene mucho poder”.
ORACION
Oremos. Padre de la gloria, santificado sea tu nombre Santo, Santo eres Padre eterno, Padre del amor y del perdón. Nosotros en esta mañana venimos en humildad, para darte gracias por la vida y por esta palabra. La palabra que nos enseña, que nos dice el Señor, realmente lo que tenemos que hacer.
La declaración es tuya Señor, te diste a conocer y también Señor, por ella, sabemos cómo se formó la creación Padre Santo. Y nosotros en esta mañana queremos estar Señor, de acuerdo tu voluntad, estar en santidad. Buscar Señor esa santidad, orar siempre, tener fe, te la pedimos Señor.
Que son manifestaciones, la oración y la fe, Señor. Manifestaciones del justo de nosotros, tú no hiciste justo. Señor, nos hiciste tus hijos. Y es necesario que cada uno de nosotros, estemos ejerciendo nuestro quehacer, en nuestro pensamiento y quehacer esa búsqueda cada día, Señor.
Te pedimos, Señor que nos bendigas. Da una bendición especial, Señor cada día sobre nuestra congregación y todos aquellos que se unan con fe Señor, con fervor, con amor a ti en estas meditaciones cortas, pero basadas en tu palabra. En el Santo nombre de Jesús. Amén, amén y amén.
MEDITACION
Ok. En este pasaje el apóstol Santiago resalta el valor de la oración hecha por los hombres justos, sabemos que no es justo ni uno en Romanos 3:10 nos dice la palabra. Aquí los que no eran justificados, han sido justificados por medio de Cristo Jesús, a través de la fe, Romanos 5:1.
Ahora bien, sí es cierto que Dios en su soberanía puede responder o no a las oraciones. Santiago nos dice que cuando ésta viene de una persona justa, Dios puede mover las circunstancias en su favor.
Amigo y hermano. Elías pedía a Dios abrir y cerrar los cielos, y esta oración fue contestada. Abraham pidió misericordia por su sobrino Lot, y fue sacado de Sodoma. David pidió perdón al Señor, y fue perdonado.
En este día, no menosprecies la oración del justo en favor de otros, ya que ésta puede mucho. Que esta meditación haya sido de gran bendición para el pensamiento y lo que vayas a hacer. Recuerda, si eres justo puedes orar y Dios estará escuchándonos. Que el Señor bendiga este día hasta luego.