INTRODUCCION
Buen día, amados hermanos, vecinos, conocidos y quienes me escuchen. Bienvenidos a nuestra comunión con Dios. Hoy nuestra meditación ha sido titulada: “El que tiene oídos” Y estamos utilizado en Apocalipsis 6 en el Nuevo Testamento, el libro de Apocalipsis 3:6 y dice así: “El que tiene oído oiga lo que el espíritu dice a las iglesias.” Un versículo, también bastante corto.
ORACION
Oremos. Padre, Santo, Santo, Santo, Padre Santísimo glorificado seas esta hora. Y en esta hora solicitamos el perdón de nuestros pecados. Que tus ojos estén atentos a nuestra congregación, a lo colectivo y a lo individual y tu dictamen o diagnóstico se ha recibido, entendido, y atento a desechar todo lo malo, oprobio a tus ojos y nuestras obras sean agradables en el cumplimiento de tu voluntad.
Gracias por el perdón y la oportunidad de nuestros quehaceres, y recibir tus bendiciones en el nombre de Jesús. Amén, amén y amén.
MEDITACION
Ok. Vamos a ver el panorama. ¿Qué vemos? Que este es un llamado a los hermanos de la Iglesia de Sardis. Muchos decían que estaban vivos, pero a los ojos del Señor no lo estaban.
Había algunos creyentes fieles que no habían manchado sus vestidos, por eso es este llamado a prestar atención de lo que el Señor le estaba hablando. En Sardis, se daba culto a Artemisa, una diosa pagana asociada con la fertilidad y la caza. De su templo quedan algunas ruinas que nos permiten hacernos una idea de sus colosales dimensiones.
Amigo y hermano. Aquí el Señor advierte a buscar cada día más de El a no caer en el materialismo. Muchos hermanos de Sardis no tenían oídos para oír a Dios. Él entonces les dice a aquellos que si lo tienen que presten atención, ya que necesitan tener como pueblo esos 7 espíritus que los representan en su totalidad. Apocalipsis 3:1
Esta expresión describe los infinitos recursos espirituales que tiene el Señor y que eran precisamente los que esta iglesia necesitaba para volver a la vida. En este día escuchemos a Dios, son días donde debemos estar conectados con él y así poder hacer su voluntad. Que el Señor bendiga tu día hasta luego.