INTRODUCCION
Buen día, amados hermanos, amigos, conocidos y quienes me escuchen. Bienvenidos a nuestra comunión con Dios. Y hoy nuestra meditación, la hemos titulado: “Vengo pronto.” y hemos utilizado el texto Apocalipsis 22:7 y dice así: ”He aquí, yo vengo pronto. Bienaventurado el que guarda las palabras de la profecía de este libro.”
ORACION
Oremos. Padre de la gloria en el nombre de Jesús, santificado sea tu nombre. Nosotros venimos delante de tu trono para pedirte perdón por nuestras fallas, nuestros pecados.
Señor, es una congregación, el número de personas en cada uno tiene, limitaciones, diferentes estilos de vida. Tratando de practicar Señor, lo que tú no has enseñado en tu palabra, como congregación.
Por eso ponemos delante de ti, todas nuestras vidas, Padre Santo. Pero te damos gracias por la propia vida y por tu palabra. Que es la que no redarguye, nos instruye, acerca de los tiempos, y para quienes han de participar y ser bienaventurados.
Nosotros somos bien aventurados, Señor, oyendo, creyendo, predicando, y preparándonos para los eventos que tengamos que vivir en tu voluntad, para esta época. Santo, Santo eres Padre, recibe nuestra honra, gloria y honor. En el nombre de Jesús, amén, amén y amén.
MEDITACION
OK. Entonces vemos el panorama. Bienaventurado el que guarda las palabras de la profecía de este libro. Cuando los hermanos, que estaban sufriendo la persecución, clamaban a Dios debido a la mortalidad sufrida, por causa de la palabra y el testimonio que guardaban muchos.
Pensaban que el Señor los había abandonado a su suerte. Pero vino esta palabra a través de su siervo Juan, de que él vendría pronto en su rescate y que su venida no tardaría. Dios quería que ellos guardaran las palabras de esta profecía, ya que fue una profecía para el pueblo de Dios, como una fuente de esperanza en medio del dolor.
Amigo y hermano. No sé qué podrías estar pasando en este momento, ni qué luchas tienes ahora en tu hogar, en el trabajo, o con tu salud donde te has sentido atribulado. En este momento, ese mismo Jesús, que le dio a los hermanos en el primer siglo, en el año 95 después de Cristo, te dice hoy en este año 2024, el siglo 21 ten fe.
Así como ayudé a ellos a salir triunfante en sus batallas, lo haré contigo hoy. Recuerda, cuando crees que Dios se demora en contestarte, es porque tiene una gran respuesta para ti, ten paciencia. Espera un poco que el que ha de venir vendrá el Señor os bendiga tu día. Hasta luego.
